Enseñanzas de Hsu Yun (Nube Vacía). 5/5
En cierta ocasión, un señor de la guerra que regresaba a casa tras una exitosa campaña militar, se detuvo en un monasterio. Fue a visitar al abad que era un antiguo profesor suyo.
Estaban sentados en el patio bebiendo té cuando oyeron una discusión entre un novicio y un monje veterano. El novicio se quejaba de que la técnica de meditación que le había dado el monje era ineficaz e inútil y le pedía algo más eficaz que le ayudara a concentrarse.
El señor de la guerra, viendo que el Maestro estaba afligido, se levantó y dijo: “Por favor, Maestro, permítame ayudar a este joven”.
A continuación, llamó a seis de sus arqueros. Llenó su taza de té hasta el borde y se la dio al novicio. “Toma esta taza de té, y, sin derramar una sola gota, llévala por todo el patio”.
El señor de la guerra ordenó a sus arqueros: “¡Seguidle! Si derrama una sola gota, ¡disparadle!” Los arqueros tensaron sus arcos y comenzaron a caminar detrás del novicio que, durante los veinte minutos siguientes, aprendió a concentrarse.
Las enseñanzas del Maestro Hsu Yun (Nube Vacía) 1839-1959