01/11/21

¿Cómo cuido la alegría en mi vida cotidiana?

En aquellos días, María se puso en camino y fue aprisa a la montaña, a un pueblo de Judá; entró en casa de Zacarías, y saludó a Isabel. En cuanto Isabel oyó el saludo de María, saltó la criatura en su vientre. Se llenó Isabel del Espíritu Santo y dijo a voz en grito: “¡Bendita tú entre las mujeres y bendito el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor? En cuanto tu saludo llegó a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. ¡Dichosa tú, que has creído! Porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá”.

(LC 1, 39-45 )

COMENTARIO

El relato rebosa alegría. De una manera preciosa e imaginativa, señalando que hasta la criatura salta de gozo en el vientre de su madre, Lucas muestra a Jesús como causa de gozo para todos, incluso desde antes de su nacimiento.

Vida y Alegría son otros nombres de nuestra identidad, del Fondo último y compartido. Basta soltar las identificaciones con las formas, para conectar en lo profundo de todo lo que es.

El sabio Lao Tze daba estas pautas: “Cierra tus ojos y verás claramente. Cesa de escuchar y oirás  la verdad. Permanece en silencio y tu corazón cantará. No anheles contacto y encontrarás la unión. Permanece quieto y te mecerá la marea del universo. Relájate y no necesitarás ninguna fuerza. Sé paciente y alcanzarás todas las cosas. Sé humilde y permanecerás entero”.

Así lo captó el maestro Eckhart: “Quién durante mil años preguntara a la vida: ¿Por qué vives? Si pudiera responder no diría otra cosa que: vivo porque vivo”.

La felicidad no es más que la entrega total, con profunda humildad y con intensa alegría, a lo que me sucede en este preciso momento, aceptando todo como es. María es dichosa porque “ha creído”: porque se ha rendido a lo que es. Pero, al mismo tiempo, el gozo favorece la aceptación. Por eso, hagas lo que hagas, hazlo con alegría; estés donde estés, estate con alegría; seas lo que seas, sé con alegría. 

 

Enrique Martinez Lozano. Fragmento del Libro: Otro modo de leer el Evangelio. Editorial Desclee De Brouwer